Cómo preparar su tienda minorista para la venta

Los propietarios de empresas que invierten tiempo en las siguientes áreas pueden esperar lograr un mejor precio de venta que si no hubieran prestado especial atención a estas áreas del negocio:

Presentación. Al igual que un hogar, un negocio debe tener una buena apariencia, especialmente si quienes lo visitan probablemente trabajarán allí. Un lugar de trabajo desordenado o poco atractivo puede desagradarles. Invierta tiempo en hacer que el lugar de trabajo, desde la trastienda hasta la planta, sea atractivo y agradable. Debe encontrar un equilibrio entre atractivo y funcionalidad.

Asegúrese de dedicar especial atención a la tienda: renuévela por completo, desde los productos en oferta hasta el mostrador y todos los expositores. Considere contratar a un profesional de visual merchandiser para crear expositores impactantes que realmente destaquen la tienda. Cuanto más le guste la tienda a un posible comprador, más probable será que desee comprarla.

Ineficiencia. Elimine las ineficiencias obvias. Si bien algunos asesores sugerirán que debe dejar el trabajo a un nuevo propietario, las ineficiencias obvias podrían interpretarse como un comentario negativo sobre los empleados de la empresa y, por lo tanto, hacerla poco atractiva. Al eliminarlas ahora y hacer que la empresa sea más atractiva, se podría lograr un precio de venta más alto.

Al considerar la ineficiencia, mire cuidadosamente el stock y descarte el viejo u obsoleto, revise los procesos de negocios para asegurarse de que sean sencillos y fáciles de seguir.

Ventajas. Desarrolle un plan sobre cómo impulsaría el crecimiento si conservara el negocio. Este plan de negocios representa la oportunidad de crecimiento para quien compre el negocio. Los compradores buscan ventajas y a menudo esperan que el vendedor les explique qué ven como tal. Estar preparado podría hacer que el negocio sea más vendible.

Empleados clave. Asegúrese de que los empleados clave para el buen funcionamiento de la empresa cuenten con contratos valiosos. Cualquier posible comprador querrá asegurarse de que estos activos vitales para la empresa estén disponibles en caso de adquirirla. Al negociar dicho acuerdo con los empleados, asegúrese de que las condiciones negociadas sean competitivas con otros precios del mercado.

Preparar un negocio minorista para la venta es muy similar a preparar una casa para la venta. Se necesita tiempo para asegurar que la oportunidad se presente de la mejor manera posible. Esta inversión, desde el principio, puede generar un mejor precio de venta y un ciclo de ventas más rápido del que se habría logrado de otro modo. El propietario del negocio también vende con la tranquilidad de saber que el negocio se vendió en buenas condiciones.

Por supuesto, una empresa gestionada para alcanzar el máximo rendimiento no debería necesitar un proyecto de preventa de este tipo, ya que los pasos descritos en este artículo representan buenas prácticas comerciales continuas.